No es una modalidad que suela practicar mucho aunque siempre es bienvenida una tranquila escapada a la orilla con amigos o para descansar o relajarte. Te acercas a una orilla, montas el puesto, las cañas, el cebo y a esperar tranquilamente. Otra modalidad más activa que practico de vez en cuando es andar orilla buscando barbos o carpas a la vista, lo momentos previos a la picada tienen mucha tensión.
La forma más efectiva de conseguir pescar uno de estos torpedos de agua dulce es con una sencilla lombriz de tierra en el anzuelo. Si el barbo la ve casi seguro que no la dejará pasar tranquilamente. En unos segundos disfrutaremos de una carrera frenética tan característica de los barbos.
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Si sale un día de lluvia o estoy cansado o simplemente para relajarme aprovecho el día en la orilla sentado y con las cañas plantadas en busca de alguna carpa. Las carpas de rio son muy fuertes y te dan buenas alegrías, en este caso tres carpas entraron al maíz.
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Suelo llevar en el coche los equipos de carpa, sobre todo en primavera y verano, en un día caluroso puede que ningún depredador de muestras de actividad. Normalmente estos días también los disfrutan las carpas paseándose sin miedo por el fondo y buscando comida de forma activa. Si no pica nada a lance prueba a cebo y quizás te lleves una sorpresa como en este vídeo.
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Si ponéis el vídeo a la máxima calidad podréis ver como el corcho se desliza por el agua antes de que estire de la caña para clavar a la carpa. Es uno de los puntos más tensos y donde más errores se comenten cuando estamos aprendiendo a pescar, mantener la sangre fría hasta estar seguro de que tienen el cebo en la boca es fundamental para conseguir capturar el pez.
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